Viaje a la madurez

Esta historia comienza cuando a mis 17 años, con el corazón roto, decidí irme a España para “escapar” de mis problemas. Para ello, postule a una universidad allá e ingrese a una carrera de ingeniería. La verdad es que en ese año, está chica era una niña malcriada que abría la boca y le daban todo lo que pidiera, solo pensaba en mí, es por eso que no tuve problemas en irme , a pesar de que mi madre estaba enferma. Era julio del 2014 y ya me tocaba irme, la despedida no fue nada triste para mi. Estaba tan emocionada imaginándome las nuevas cosas que irían a pasar. Después, de un viaje de 12 horas por fin llegue a mi destino, una ciudad al norte de España, mi tía fue quien me recibió. Al principio veía todo con real asombro, pues era la primera vez que estaba en Europa, ni yo me la creía jajaja. Me hospede en la casa de mi tía, una tipa muy maja. Pasaron los días de mi llegada y ya conocía cómo ir a mi nueva universidad, para esto tenía que tomar dos buses. Un largo viaje, pero yo suponía que valdría la pena, el primer día de clases me senté adelante y me quede dormida por el cambio de horario  , no conocía a nadie, todos me miraban raro pensaban que era mexicana y les decía no amiguitos yo soy peruana.
Las semanas pasaban y comencé hacer amigos, ya que la mayoría eran chicos, yo me sentía un chico más, todo iba bien hasta que conocí a Javi, un chico muy guapo , jamás en mi vida hasta ese momento me imaginé que un chico como el se fijara en mi , hacíamos grupos en los cursos, estudiábamos juntos y todo lo que hacen unos simples compañeros. Hasta que un día el pregunto si conocía un bar en el centro de la ciudad, obviamente yo no conocía mucho, así que le dije y el me invitó a ir. Nunca en mi vida había estado tan emocionada de salir con alguien, era una cita oficial con el chico de mis sueños, a pesar de haber estudiado juntos y vernos todos los días, en ese momento me sentía demasiado nerviosa. Me puse los  ovarios y saqué los nervios de mi cuerpo, llegue al bar y ahí estaba, parado esperándome, entramos y comenzamos a tomar chupitos, pero que tales chupitos, me pusieron muy feliz rápido. Después, fuimos a su departamento, bueno solo dire que una cosa llevo a la otra y así sucesivamente, tuvimos sexo, en mi cabeza solo decía "que estúpida eres", pero mi cuerpo me lo agradecía. Entonces, desde ese preciso momento el y yo comenzamos a vernos solo para tener sexo, mas que eso era, poco a poco comenzamos a hacer cosas de amigos, a conocernos más, tener más confianza, así transcurrió el tiempo y pues un día sentados en el paradero esperando a que mi bus llegará, me dijo : "quieres ser mi enamorada", a lo que yo feliz y contenta dije SI. Pasaban los día y como yo vivía sola, decidí mudarme con el, estaba en su piso de miércoles a domingo y me iba a la resi los demás días, practicamente era una covivencia. Ahora que veo al pasado, me miro a mi misma y veo que era demasiado joven, tenia 17 años, no se que tenía en la cabeza.Con el aprendí demasiadas cosas, aprendí que si de verdad quieres conocer a alguien pues vive con el y verás lo mejor y lo peor, todo iba bien, hasta pensábamos en adoptar un perro, pero un día nos dimos con la sorpresa que estaba embarazada. Fue como un baldaso de agua fría, pues solo pensé en que sería valiente y lo tendría y no me importaba si el me apoyaba o no, así que le dije lo que pensaba y el me dijo que no me dejaría y la triste idea de que seriamos una familia estaba en mi absurda cabeza por un mes. Hasta que llego mi chequeo, el saco mi cita con el obstetra y pues fuimos, llegamos y me di con la sorpresa que no era cita de chequeo, si no era una cita para que abortara. En ese momento mi mente se puso en blanco, me senti sorprendida, asustada, quería salir corriendo de ahí, pero ni una parte de mi cuerpo hacia caso a mi cerebro, así que solo me quedo escuchar lo que el imbécil me dijo: si no abortas será tu problema porque yo me desentenderé de ese bebe. En ese momento solo pensé una cosa en que pesaba más el "amor" que sentía hacia el, entonces sin ver los pros o contras acepte abortar. Solo les podré decir que en el preciso momento que metían sus herramienta o cosas para sacarme el bebe y yo sentía todo eso, sentía que una parte de mía moría, me sentí tan mal hacerlo, pero no había vuelta atrás, ya lo había hecho. Ese día salí y pues mi ex me llevo a su depa, no cruzamos ni una sola palabra o mirada, así fueron pasando los días y para lo único que hablabamos era para saber cuando el otro no estaba en el depa o simplemente para no cruzarnos, pero aun eramos enamorados. El dolor enorme y lo peor es que estaba sola, me sentía mal, así que decidí volver a Perú.

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